Tenía muchas ganas de escribir este post, hoy ha sido el día.
Ayer por fin mi hijo terminó el tratamiento de
quimioterapia, y aunque todavía nos queda un camino muy largo, él ya no sufrirá
mas el daño de estos medicamentos.
Quiero agradecer a todo el mundo el apoyo que nos han dado, pero en especial y por esto
escribo estas palabras, a todos mis compañeros de EUROFORMAC.
Desde el comienzo de la enfermedad, ellos siempre han estado
a mi lado, era fantástico ver que con UNA SOLA MIRADA me lo decían todo.
Tengo un nudo en la garganta mientras escribo, y mis lágrimas
caen de mis ojos, quiero decir tantas cosas pero es imposible expresarlo con
letras.
Fue maravillosa la despedida que me hicisteis y la muestra
de cariño a mi familia no tiene precio.
Con el abrazo que nos fuimos dando ese día, quise dejar en
vosotros toda mi fuerza y el amor que os tengo.
Solo voy a nombrar a PEDRO, el alma de la empresa, porque gracias a él, existe
EUROFORMAC y hemos podido estar juntos un grupo de fantásticos trabajadores y
lo que es mejor, una incomparable FAMILIA.